No Hay Mallas Para Un Gordo

Yo era bailarín de éxito en las compañías más conocidas de la España de los 90 y sin embargo me dejé llevar por una pasión: comer. Comer y comer sin medida. Con el tiempo, no pude bailar y tuve que cambiar de trabajo. Seguí comiendo y engordando y a pesar de tener una familia encantadora […]