Monsamor

Resumen del libro

libro Monsamor

Esta novela parece una parodia del relato del dean de Santiago. Hacia 1520 fray Miguel de Zuheros vive en un convento sevillano y lamenta su vida sin riesgos. El padre fray Ambrosio de Utrera, teosofo, le propone reiniciar su vida con fray Tiburcio, bajo su antiguo nombre de Morsamor. Ambos conquistan en Lisboa a Donna Olimpia y Teletusa, con quienes embarcan a la India y alli defienden a los portugueses y a los brahmanes de los musulmanes. Morsamor se casa con la bella Urbasi y tras perderla marcha al pais mogol, donde conoce al sabio Sankacharia, amigo de fray Ambrosio. Decide entonces regresar a Espana, y en el viaje de vuelta naufraga… Despierta en su convento, junto a fray Ambrosio: ha entendido el lenguaje de los suenos y muere en paz entre sus amigos.


Ficha del Libro

  • Número de páginas: 154
  • Autor: Juan Valera
  • Tamaño: 1.80 - 2.46 MB
  • Descargas: 1642

Opciones de descarga disponibles

Si quieres puedes obtener una copia de este ebook en formato EPUB y PDF. A continuación te mostramos un listado de posibilidades de descarga disponibles:


Opinión de la crítica

POPULARR

4.7

62 valoraciones en total


Otros Libros Relacionados de Juan Valera

A continuación te presentamos otros libros de Juan Valera disponibles para descargar gratuitamete

  • Juan ValeraNuevas Cartas Americanas

    En Nuevas cartas americanas aparece el punto de vista peninsular ante los movimientos de Independencia de latinoamérica y las reivindicaciones históricas del Nuevo Mundo, en específico de Cuba. Se trata de una visión muy distinta a la que muestra la historia oficial de América, con una visión descarnada de los orígenes étnicos de Latinoamérica, aunque esgrime argumentos económicos y políticos que merecen atención.

  • Juan ValeraLeyendas Del Antiguo Oriente

    «El recuerdo de la gran civilización greco-romana, ya gentílica, ya transfigurada más tarde por el Cristianismo, no dejó de columbrarse hasta en los siglos más tenebrosos de la Edad Media. Los pueblos de Europa siguieron avanzando a la luz de aquel recuerdo, y pronto volvieron al verdadero camino de la civilización, del cual no cabe duda que se habían apartado. Y no es esto negar la marcha constantemente progresiva del humano linaje.»